El 28º Festival de Málaga celebró el sábado su gala de clausura, y Vanity Fair se encargó de dar una gran fiesta para despedir a actores, directores y miembros de la industria que durante diez días han llenado la ciudad andaluza acompañando al público volcado un año más con su festival.

Cuando Salva Reina y Elena S. Sánchez bajaron el telón del Teatro Cervantes tras la ceremonia de cierre, El Merendero Antonio Martín abrió las puertas convertido en la casa de esta cabecera. Vanity Fair brilló con sus neones y los del patrocinador oficial del evento, IQOS, en la Malagueta atrayendo las miradas de toda la ciudad curiosa por lo que allí se celebraba: el cine español e iberoamericano. Karla Sofía Gascón pisó su segunda alfombra roja de la noche después de entregar la Biznaga de Plata a la Mejor Dirección. Su compañera en el escenario, Carolina Yuste, tampoco quiso que le contaran la fiesta y disfrutó de una noche única junto a Los Javis, Javier Calvo y Javier Ambrossi, el director de Mariliendre, Javier Ferreiro, y casi todos los protagonistas de la serie de Atresplayer que clausurado la sección oficial del Festival: Blanca Martínez, Martin Urrutia, y Álvaro Jurado.

Alberto Ammann y su pareja Clara Méndez-Leite, Carlos Bardem, Mirela Balić, José Corbacho, Daniel Ibáñez, Nerea Barros, Andrea Trepat, María Castro, Marta Hazas, Pepe Lorente, Chacha Huang y María Bernardeau, fueron otros de los muchos invitados de Vanity Fair en Málaga. Bailaron al ritmo de la música que marcó el DJ e influencer Mike Fajardo.

Los músicos Álvaro de Luna, Fabbio y Martín Vallhonrat de Carolina Durante, se apuntaron a una fiesta en la que no faltaron figuras influyentes de las redes sociales como Violeta Mangriñán, Rocío Camacho, IlloJuan y Lola Lolita. Los invitados pudieron conocer el concepto de bienestar integral masculino gracias a Optimum Men, de Hifas da Terra. Hubo tiempo para brindar por lo logrado y lo que queda por venir con los vinos que sirvió Emilio Moro, y degustar los cócteles preparados con Barceló Imperial. También para darse un capricho dulce con las gominolas de Vidal y por qué no, una smash burger de XPecado, que un maratón como este bien lo merece.